¿DORMIR POCO PUEDE INFLUIR EN LA GANANCIA DE PESO?

¡ASÍ ES!

A nivel mundial el 26% de la población reporta no dormir suficientes horas. Los cambios en la manera de comer y la calidad del sueño influyen en el control de la glucosa, ya que el sistema nervioso central responsable también del descanso y reparación a través del sueño se relaciona con el metabolismo del organismo.

La calidad del sueño en adultos parece estar asociada con cambios en la hormona de crecimiento, cortisol y otras hormonas las que en conjunto podrían afectar la sensibilidad de la insulina y/o la tolerancia de la glucosa, así como también disminuir los niveles de leptina, hormona que nos ayuda con la sensación de saciedad lo cual nos llevará a tener más apetito, mayor estrés y por lo tanto comer más cantidad de alimentos y muchas veces de no tan buena calidad nutricional.

Un estudio realizado en México concluye que el tener una mala calidad de sueño aumenta hasta 7 veces el riesgo de tener un perímetro de cintura fuera de rango normal (más de 88 cm en mujeres y más de 102 cm en hombres).

Se ha observado que periodos cortos de sueño (menos de 7 horas) y periodos muy largos (más de 9 horas) se encuentran fuertemente asociados con la ganancia de peso en adultos. Cabe mencionar que no solo es importante el tiempo que dormimos sino también la exposición a “luz nocturna” (la luz de los dispositivos móviles) la que se encuentra vinculada a la aparición de trastornos del sueño reportándose que a mayor exposición a la luz artificial peor es la respuesta de la secreción de la melatonina (hormona que contribuye a disminuir el tiempo necesario para conciliar el sueño).

Por lo tanto, como pilar importante en la mejora los hábitos de vida saludable también debemos tener en consideración la duración del sueño, su regularidad y la armonía entre los horarios de sueño y los patrones alimentarios, ya que el sueño es esencial para el bienestar físico y mental.

Te dejo algunas sugerencias que pueden ayudarte a mejorar la Higiene del Sueño:

  • Dormir al menos 7 horas de sueño continuo hasta un máximo de 9 horas.
  • Establecer una hora fija para dormir y despertar diariamente.
  • Alejar la luz artificial proveniente de los dispositivos electrónicos (una hora antes de dormir).
  • Comer la última comida dos horas antes de dormir.
  • Disminuir el consumo de cafeína entre 3-6 horas antes de

 

Referencias Bibliográficas:

https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0031938421000378?via%3Dihub

https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC6086945/

http://www.revistas.unam.mx/index.php/repi/article/view/81361/71539

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